VI. El mundo colonial y dependiente

El movimiento anticolonial más significativo en los años de entreguerras fue el que resquebrajó la dominación británica sobre el subcontinente indio.

Con la Primera Guerra Mundial acabó una época de las relaciones anglo-indias. Al concluir el conflicto, los reclamos de los agraviados y el afán de independizarse se hicieron más profundos y extendidos. El Congreso Nacional Indio (también conocido como el Partido del Congreso, CNI) se radicalizó, en un doble sentido. En el plano político avanzó hacia la reivindicación de la independencia, y en el social, especialmente a través de la carismática figura de Mohandas Gandhi, se convirtió en un movimiento de masas.

EL POETA BENGALÍ RABINDRANATH TAGORE (1861-1941) Y MAHATMA GANDHI

A VECES SE CONFUNDE EL TÍTULO DE “MAHATMA” (ALMA GRANDE) CON MOHANDAS, EL PRIMER NOMBRE DE GANDHI. MAHATMA SE DENOMINA A MUCHOS SANTOS DE LA TRADICIÓN HINDÚ. EN SU AUTOBIOGRAFÍA GANDHI DICE NO CONSIDERARSE MERECEDOR DE SEMEJANTE DISTINCIÓN; SIN EMBARGO, ÉL MISMO TERMINÓ ABANDONANDO SU NOMBRE ORIGINAL Y FIRMANDO MAHATMA GANDHI.

La opresión de la metrópoli fue cuestionada por movilizaciones de masas encauzadas por un líder que proponía la construcción de una identidad india a través de la recuperación de la lengua nativa y de cambios en las conductas personales para alcanzar un real autogobierno.

La importante contribución de la India en la Primera Guerra Mundial afianzó la demanda de los nacionalistas en pos de una mayor autonomía. Londres se mostró dispuesto a conceder algunas reformas que no afectasen su posición dominante y, al mismo tiempo, no dudó en instrumentar una dura represión para detener la movilización popular. En 1919 el Parlamento británico aprobó la ley Montagu-Chelmsford (Edwin Samuel Montagu era el ministro de Estado para la India, y el vizconde Chelmsford era el virrey) en virtud de la cual los Consejos Legislativos existentes fueron convertidos en Parlamentos, aunque con atribuciones restringidas. En el caso del Parlamento central, si bien la mayoría de sus miembros pasaron a ser elegidos, el gobernador contó con el derecho de vetar sus resoluciones. En los gobiernos provinciales se introdujo el principio de diarquía, que establecía un reparto muy desigual de las atribuciones gubernativas entre los funcionarios británicos y el personal nativo. Algunos sectores, tales como educación y sanidad en el nivel provincial, pasaban a manos de los indios, pero resortes básicos como la policía, la justicia y las finanzas seguían en poder de los funcionarios metropolitanos.

En un clima de agitación social y con el CNI dividido respecto de la actitud a tomar frente al nuevo estatuto político, fueron aprobadas leyes excepcionales –Rowlatt Act–, que autorizaban la suspensión de las garantías individuales en situaciones de agitación social. En oposición a esta legislación, Gandhi propuso la huelga general. En los centros urbanos se desencadenaron importantes disturbios y en la ciudad de Amritsar, en abril de 1919, se produjo una feroz matanza cuando las tropas británicas dispararon contra una multitud congregada en un jardín amurallado para celebrar una festividad hindú, sin darles aviso de desconcentrarse y habiendo bloqueado la salida principal. Los británicos impusieron la ley marcial y Gandhi atacó duramente la acción de las autoridades, pero también se opuso a la violencia desplegada por los indios después de la masacre.

Bajo el liderazgo de Gandhi, el Partido del Congreso –CNI– fue reorganizado. Con el propósito de ampliar la afiliación abrió sus puertas a cualquier ciudadano que pudiera pagar una contribución nominal. También se estableció una jerarquía en el seno de los comités para mejorar la disciplina y el control sobre un movimiento hasta entonces amorfo y poco coherente. Aunque solo coyunturalmente ocupó cargos en la conducción del partido, Gandhi fue el artífice central de la estrategia política del CNI.

En la década de 1920 se profundizaron las tensiones en el campo nacionalista. Por un lado, en el Partido del Congreso se hizo evidente la presencia de dos fracciones, una dispuesta a participar en las elecciones legislativas y otra que rechazaba la cooperación con los británicos denunciando el carácter parcial de las reformas políticas aprobadas en 1919. Otro factor que complicó aún más el panorama residió en la existencia de diferentes comunidades con demandas y objetivos propios, por ejemplo los musulmanes o los intocables, que no se sentían representadas por el CNI.

La cooperación entre hindúes y musulmanes –que había sido significativa al principio de la campaña de no violencia– se resquebrajó cuando se puso fin a esa campaña. Gandhi exhortó a la unidad, se impuso un ayuno de tres semanas, todo eso sin grandes resultados, y decidió concentrar su actividad en el trabajo en las aldeas.

A fines de los años 20 se intensificó la conflictividad social, en parte, debido al impacto negativo de la crisis económica y en gran medida a raíz de la decisión de Londres de ofrecer reformas políticas parciales frente al reclamo de independencia del CNI. En la oleada de huelgas desplegadas entre 1928 y 1929, los comunistas desempeñaron un papel importante. Su partido fue declarado ilegal –desde 1934 hasta 1942–; no obstante, cuando la Internacional Comunista propuso la política de frentes populares en 1935 sus partidarios tuvieron posibilidades de colaborar con el ala izquierda del Partido del Congreso y con los sindicatos.

Gran Bretaña combinó la represión con la convocatoria a negociar en torno a un nuevo estatuto político, una propuesta impulsada desde 1928 con escasos resultados. El debate sobre la reforma constitucional se vio trabado por dos obstáculos principales: el carácter limitado de la autonomía concedida por Londres y los desacuerdos entre el Partido del Congreso y la Liga Musulmana sobre las prerrogativas políticas reconocidas a los musulmanes en la nueva arquitectura institucional.

MUHAMMAD ALI JINNAH (1876-1948)

LÍDER DE LA LIGA MUSULMANA Y PRIMER GOBERNADOR GENERAL DE PAKISTÁN AL SER CREADO COMO ESTADO NACIONAL EN 1947.

En el marco de la segunda campaña de desobediencia civil, el Parlamento británico puso en marcha la denominada Conferencia de la Tabla Redonda, que sesionó en tres momentos –1930, 1931 y 1932–, sin avanzar en la elaboración de un documento consensuado. Gandhi, liberado a principios de 1931, asistió al segundo encuentro en Londres en el que solo logró pequeñas concesiones para el problema de la sal, la promesa de derogar algunas medidas de seguridad y la liberación de los detenidos a lo largo de las movilizaciones. A su regreso a la India, el líder indio reinició la campaña de no cooperación y volvió a ser encarcelado. Desde la prisión, se opuso al reconocimiento de listas separadas para los intocables, un reclamo de Bhimrao Ambedkar, el líder de la casta más baja india, al que los británicos dieron su consentimiento.

Gandhi amenazó con un ayuno hasta su muerte y Ambedkar acabó cediendo, renunció a las elecciones separadas con la condición de que las castas inferiores tuvieran un cierto número de escaños reservados para sus dirigentes.

Finalmente el gobierno británico aprobó en 1935 la nueva Ley del Gobierno de la India, que incluía dos objetivos básicos: la creación de una federación que reuniría a los reinos gobernados en forma absoluta por los príncipes con las provincias que integraban la India británica y, en segundo lugar, la instauración de la autonomía provincial.

La creación de la Federación significaba que el Parlamento central de la colonia quedaría integrado por los representantes nombrados por los príncipes y por los diputados elegidos en las provincias. A los primeros se les concedía un número de bancas superior al que les correspondía de acuerdo con el porcentaje de población de esos territorios respecto de la población total de la India. Esta composición del Parlamento favorable a los intereses ingleses fue rechazada por el CNI, que también objetó su nula intervención en el manejo de la política exterior y del presupuesto. Pero además, para que este Parlamento se pusiera en marcha era preciso que diera su conformidad un importante número de principados, y hasta 1939 los príncipes no habían confirmado su participación. En consecuencia, cuando estalló la Segunda Guerra Mundial el gobierno central mantenía la estructura fijada por la Constitución de 1919.

En el ámbito provincial, en cambio, se amplió la autonomía del gobierno local en manos de ministros indios sujetos al control de cuerpos legislativos elegidos a través de elecciones, y al mismo tiempo se incrementó el número de votantes: aproximadamente el 43 % de los hombres y el 10 % de las mujeres gozó de este derecho. No obstante, los gobernadores británicos se reservaron facultades de peso, tales como decretar el estado de emergencia, que dejaba en suspenso todas las garantías y derechos de la ciudadanía. El nuevo estatuto rectificó fronteras provinciales y dispuso que Aden y Birmania quedasen separadas de la India.

Los cambios se pusieron en marcha con la convocatoria a las elecciones legislativas a principios de 1937. El CNI fue el único partido que presentó candidatos en todas las provincias, y obtuvo un gran éxito. Los musulmanes solo triunfaron en Bengala y en Punjab. El CNI vaciló en formar gobierno, ya que temía que los gobernadores utilizasen sus poderes extraordinarios. Finalmente formó gabinete en ocho provincias en las que poseía la mayoría, pero sin abandonar la agitación nacional por la independencia. La escasa predisposición de los nacionalistas indios a promover una política de alianzas con los musulmanes, por el contrario, propició la preeminencia de los valores hindúes; el temor de los musulmanes a quedar como una minoría sin garantías sólidas respecto de la preservación de su identidad religiosa y cultural, y la predisposición de Londres a promover negociaciones por separado con las diferentes comunidades generaron condiciones propicias para la creación de un Estado musulmán escindido de la India cuando se declaró la independencia.

Al estallar la guerra, el CNI no se alineó automáticamente junto a Londres: estaba dispuesto a apoyar a Inglaterra en el conflicto, pero pedía garantías de que se reconociese su derecho a la independencia y, cuando la metrópoli se negó, el partido aprobó una nueva campaña de desobediencia civil (octubre 1940-enero 1942). En esta ocasión no se organizó como un movimiento de masas, sino a través de acciones de militantes que infringían las leyes con discursos de oposición a la guerra, y eran encarcelados. Los gobiernos provinciales renunciaron, y en las provincias afectadas los gobernadores británicos tomaron las riendas con plenos poderes. Uno de los dirigentes del ala radical del CNI, Subhas Chandra Bose, elegido presidente del partido en 1937 a pesar de la oposición de Gandhi, abandonó la India y se dirigió a Alemania para luchar contra los británicos en pos de la independencia de su país.

El avance japonés a través de Asia sudoriental hizo de la defensa de la India un problema urgente, y Londres envió un representante en marzo de 1942 para lograr la colaboración de la dirigencia india en el esfuerzo de guerra. La misión fracasó. A mediados de 1942, el CNI aprobó la exigencia de independencia inmediata: “Dejen India” fue el lema esgrimido por Gandhi al convocar a la desobediencia civil no violenta para ser libres. Londres resolvió encarcelar a todos los dirigentes del Partido del Congreso. Dos años después de finalizado el conflicto mundial, Gran Bretaña abandonó su más preciada colonia y fueron reconocidos dos nuevos Estados: India y Pakistán.

En el caso de Indochina, parte del Imperio francés, las resistencias más significativas se produjeron en Vietnam. Tempranamente, los nacionalistas vietnamitas fueron influidos por los procesos de Japón, India y China. En 1904 jóvenes estudiantes crearon la Asociación para la Reforma, con el fin de lograr cierto grado de autonomía a través de reformas pactadas con la metrópoli. En 1917 se fundó en Saigón el Partido Constitucionalista, similar en sus planteos al Partido del Congreso de la India, pero al que Francia no concedió ningún tipo de reconocimiento. En los años de entreguerras, al calor del proceso chino y debido al fuerte autoritarismo de la administración francesa, hubo desplazamientos hacia posiciones más radicalizadas. Una de ellas, de inspiración puramente nacionalista, dio lugar a la creación en 1927 del Partido Nacional Vietnamita que, siguiendo el modelo del Kuomintang chino, propuso la eliminación del colonialismo y la instauración de la república. La vertiente de izquierda, encabezada por Ho Chi Minh (apodo de Nguyen Ai Quoc), concretó la formación del Partido Comunista Indochino en 1930.

Ho Chi Minh llegó a París con algo más de veinte años y , en 1919, cuando se llevó a cabo la Conferencia de Versalles, presentó a Wilson, el presidente norteamericano autor de los 14 puntos para acordar la paz, un petitorio muy moderado para poner freno al despotismo francés, petitorio que nunca recibió respuesta. En 1920 intervino en la fundación del Partido Comunista francés, y en 1923 fue convocado por Moscú y se incorporó a la Internacional Comunista. Más tarde se trasladó a China como traductor y ayudante del consejero soviético que intervino en forjar la alianza entre el Kuomintang y los comunistas. Se integró en la escuela militar que los soviéticos crearon en China para preparar al éjercito encabezado por Chiang Kai-chek, y cuando este masacró a los comunistas en 1927, Ho Chi Minh consiguió huir. En 1930 participó en las revueltas de Yen Bay, provincia vietnamita. Esta oleada de levantamientos y la violenta represión francesa redujeron las posibilidades de los reformistas vietnamitas, mientras que los comunistas ganaron creciente peso a través de redes sociales y políticas clandestinas.

Condenado a muerte por las autoridades coloniales francesas, se refugió en la Unión Soviética y en 1938 entró en contacto con Mao, en China. Después de que Francia fuera invadida por los nazis, los militares japonesas ocuparon Indochina en setiembre de 1940, sin encontrar resistencia. En términos oficiales, se concertó que Tokio pudiera utilizar las instalaciones militares para sus tropas a cambio de que los franceses mantuvieran el control administrativo. Ho Chi Minh regresó a su patria en 1941 y fundó la Liga para la Independencia de Vietnam (Vietminh), un frente amplio para luchar contra Japón y contra la Francia de Vichy, en el marco de la Segunda Guerra Mundial.

NGUYEN AI QUOC, EN LA FUNDACIÓN DEL PARTIDO COMUNISTA FRANCÉS.