“Insomne” de Günter Grass
Mi aliento erró el ojo de la aguja.
Y ahora tengo que contar
y deshojar, bajando, las escaleras hacia casa.
Pero los corredores por los que me arrastro
desembocan en fosos de agua,
en los que renacuajos...
Cuenta otra vez
Mi cinta parlotea al rebobinar su tercer decenio.
La cama sale de viaje. Y en todas partes
la aduana interviene: ¿qué lleva usted ahí?
Tres calcetines, cinco zapatos, un chisme para la niebla...
Los cuentan en varios idiomas:
las estrellas, las ovejas, los tanques, las voces...
Se hace una suma provisional.
Traducción de Miguel Sáenz